Hay una frase que se le atribuye a Mahatma Gandhi que dice “Si querés cambiar el mundo, cambiate a vos mismo“.
Muchas veces la escuché, pero estos últimos días estaba considerando la media verdad que hay en esa frase; y siempre que no hay una verdad completa, puede haber una mentira.
La realidad es que pensar que si queremos cambiar el mundo sólo alcanza con cambiarse a uno mismo, nos estaríamos engañando. No somos el centro del universo: hay un mundo muy complejo, problemático, fuera de nuestro alcance y sin cambios positivos allá afuera. Una gota fucsia en medio del océano no va a hacer la diferencia.
Si queremos cambiar el mundo, para bien o para mal, lo que tenemos que hacer es aumentar nuestro poder de influencia en la sociedad. Hacé eso y ahí vas a estar cambiando el mundo.